PAINT(H)ING NOW

A Group Exhibition by Adela Angulo Portugal, Arta Delharte and Cecilia Sebastian de Erice

11.09.2025 . 25.10.2025

[…] de ella ver quisiera su andar amable 

y la clara luz de su rostro antes 

que a los carros lidios 

o a mil guerreros llenos de armas.

Safo  [1]  

Cuando Hermes robó los bueyes de Apolo, obligó a las bestias a caminar de espaldas para que el rapto resultara más difícil de advertir por la deidad. De forma análoga, en los últimos años hemos asistido a la revuelta de un grupo de mujeres artistas que hacen girar el dial de la práctica pictórica en sentido contrario a lo establecido. Como Hermes, estas creadoras toman una herramienta tradicionalmente en manos masculinas para invertir su curso y cuestionar las prácticas —consideradas incontestables— a las que dicha herramienta ha servido de vehículo.

Con este “hurto”, las manos femeninas abren campos temáticos más amplios, próximos, lúdicos y comunales. Lejos de una tradición considerada inefable, surge la posibilidad de una obra nueva y compartida. “La cosa es de todos”, parecen afirmar Adela Angulo Portugal (Madrid, 1999), Arta Delharte (Madrid, 1999) y Cecilia Sebastián de Erice (Madrid, 1996),  en Paint(h)ing Now, exposición inaugural de la temporada en la Galería Ilgaz Yildiz. Así, si la abstracción se ha asociado tradicionalmente a exploraciones sin fisuras, aquí se presenta como espacio líquido, permeable e integrador, donde la imagen transgrede su distancia con la realidad y se contagia de la atmósfera material que habita y dialoga con el espectador.

Rota la tradicional ventana a otro mundo, la práctica propone reordenar los intereses de la pintura, abriendo las posibilidades de apropiación inesperada e incorporación de materiales y soportes más allá del marco. En esta exposición, el espectador se enfrenta no tanto a una “pintura expandida” como a una manufactura de “cosas pintadas” —las paint(h)ings a las que alude el título—, y deberá navegar la tensión inherente en esta resignificación.

En ese acto aflora tanto la tensión y el dolor por apropiarse de algo que debía haber sido compartido, como un humorismo punk al constatar que un orden se subvierte (¿o se restituye?). Julie Mehretu ofrece una posible respuesta a esta cuestión, al señalar que su área de interés pictórico se mueve en el intervalo que separa el momento de imaginar lo posible de la incertidumbre sobre en qué consiste realmente esa posibilidad [2]. En esta exposición se sugieren tres versiones de esa indagación, todas orientadas a explorar el límite, no a cristalizar certezas. 

En el caso de Adela Angulo Portugal, el límite se transforma en punto de referencia o de partida para la obra pintada. Su mirada minuciosa otorga tanto peso a lo representado como al material empleado, a la ubicación de la obra en espacios ajenos a su uso tradicional o a su capacidad de extenderse hacia territorios fronterizos con la escultura y la instalación. 

De modo complementario, aunque más abrasivo, Arta Delharte sitúa su práctica en el incierto umbral entre creación y destrucción, un ámbito donde contagio y demolición conviven con naturalidad. Es una interzona fértil para la hibridación entre lo sólido y lo virtual, en la que se cuestiona un sistema pictórico tradicionalmente separado no solo de otras disciplinas, sino también del propio ámbito humano. 

Por su parte, Cecilia Sebastián de Erice plantea el despliegue de una vasta red de relaciones cruzadas en un paisaje cromático plagado de ecos, intersecciones y lenguajes. Sus cuadros se expanden en un diálogo orientado a unificar flujos de pensamiento y emoción. Su pintura generativa deriva en una conexión significativa, propiciando la aparición de un paisaje psíquico común con el espectador. 

Antes de cerrar, resulta iluminador remontarse al París de 1905, donde Rainer Maria Rilke se encuentra con Auguste Rodin, primero para trabajar en una monografía sobre el escultor y, después, para servirle como secretario. Fascinado por la materialidad de las esculturas, el joven poeta fantasea con el contagio entre piedra y palabra en sus “poemas-cosa” —los Nuevos Poemas [2] —, con los que busca quebrar las barreras entre materia y concepto. Aunque el empeño se queda en un intento, bello pero incompleto, años después, las Elegías del Duino se ubicarán en esa misma interzona existencial, cambiando para siempre el pensamiento contemporáneo. También el eco de ese intento de quebrar las lindes artísticas se puede escuchar levemente al transitar esta exposición. 

La hibridación, al igual que el hurto, suele tener consecuencias impredecibles. Si volvemos al origen de nuestra historia, veremos que Hermes, tras el robo de los bueyes, mata a una tortuga para fabricar, con su caparazón y unas cuerdas de tripa de buey, un utensilio de su invención: la lira, el primer instrumento musical. Descubierto por Apolo, se ve obligado a entregar la lira para evitar su ira, cambiando para siempre el destino de la música en la Tierra.

Paint(h)ing Now habla de apropiación, mutación y cambio de paradigma en la apreciación de lo conocido; de la invención de una pintura que es, ante todo, vínculo con el espectador y con nuestro tiempo.  La pintura ya no es un refugio seguro ni un canon incuestionable; estas obras marcan el aquí y ahora de una práctica en transformación, campo abierto y aliento persistente que, entregado a nuevas manos, encuentra un flujo vital capaz de sostenerla en la atmósfera, parca en oxígeno, de nuestro mundo desencarnado.

David Morán Álvarez

Septiembre de 2025

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[1] SAFO, Poemas y fragmentos. Editorial Hiperión, 1990.

[2] MEHRETU, Julie. Julie Mehretu paints chaos with chaos - from Tahrir Square to Zuccotti Park. Entrevista con Jason Farago, www.theguardian.com. June 20, 2013.

[3] RILKE, Rainer Maria. Nuevos Poemas I y Nuevos Poemas II. Editorial Hiperión, 1991 y 1994.  

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